Neurociencia VS Neuroderechos

Por Katalina Troncoso Monzón (Estudiante de la Universidad Andrés Bello).

¿Se imaginan un día poder calcular la cifra de lo que el cerebro puede memorizar? O ¿Curar el Alzheimer o la esquizofrenia? o incluso ¿Mapear el cerebro tanto a nivel estructural como funcional?

Aquí entra en juego la bioética, en el cómo va a influenciar esto en los derechos humanos o en la nueva creación de estos para poder proteger la integridad física y moral de los seres humanos. Dentro de todo, la bioética es la rama de la ética encargada de promover los principios para las conductas más adecuadas del humano en relación con la vida.

Entonces, ¿qué tan lejano se ve la evolución de nuestra especie? Y esto, ¿cómo influye en el derecho? Los cambios de las especies tienen que ver con el cambio del cerebro, ¿el homosapiens es el único puerto de evolución? No, con el paso del tiempo lograremos transformarnos en una especie humana que va a utilizar la neuro tecnología para aumentarse a sí mismos como lo hemos hecho a lo largo de varios años con lentes para los ojos, audífonos para los oídos, marcapasos para el corazón, entonces ¿porqué no algo que potencie al cerebro?

Y esto ¿en qué se relaciona la neurociencia con los neuro derechos?

La relación entre la neurociencia y los neuro derechos es un tema complejo y en evolución que involucra tanto la investigación científica como las cuestiones éticas y legales relacionadas con el funcionamiento del cerebro humano y la protección de los derechos individuales.

Primero que todo, la neurociencia se enfoca en el estudio del sistema nervioso, incluido el cerebro, el como generamos emociones, pensamientos y acciones siempre tomado de la mano con avances tecnológicos. Por otro lado, tenemos a los neuro derechos como un conjunto de principios y normas éticas legales que buscan proteger los derechos individuales de las personas. Estos se verían afectados con las diversas investigaciones, por la aplicación de la neurociencia y tecnología neurológica, vulnerando derechos como la privacidad cerebral, autonomía individual, entre otros.

Los neuro derechos se están convirtiendo en una preocupación importante a medida que la neurociencia avanza y se utiliza en una variedad de aplicaciones, desde la neuro tecnología hasta la neuroética.

Algunos expertos de la “Fundación NeuroRights” que dirige el profesor Yuste señalan los cinco neuro derechos que deben protegerse dentro de un axioma universal de los neuro derechos:

1. El derecho a la privacidad mental:  a medida que la neurociencia avanza y se vuelve más sofisticada en la interpretación de la actividad cerebral, surgen cuestionamientos sobre la preservación de la privacidad de la información cerebral. Los derechos neurocognitivos se relacionan con la imperante importancia de salvaguardar la confidencialidad de los datos cerebrales y asegurar que la información adquirida mediante tecnologías neurológicas no se emplee de forma inapropiada. 

2. El derecho a la identidad personal: los derechos neurocognitivos también hacen hincapié en el principio de la autonomía individual. Esto implica que las personas deben tener el derecho de tomar decisiones fundamentadas en lo que respecta a su participación en investigaciones relacionadas con la neurociencia, así como ejercer control sobre su información cerebral personal. El tema del consentimiento y la capacidad de decisión desempeñan un papel fundamental en este contexto.

3. El derecho al libre albedrío: ya no existiría la libertad de expresión, debido a la inserción de neuro datos, pero no por completo, este es un debate constante entre la ética y la ciencia, porque ¿cómo deberíamos juzgar la responsabilidad moral de nuestras acciones? Dentro de una sociedad viendo el lado político o étnico, se generaría una especie de privación o represión a los ciudadanos al existir dicha retención de datos de nuestros cerebros.

4. El derecho al aumento de la neuro cognición: se refiere a la idea de que las personas deben tener el derecho de mejorar o potenciar su capacidad cognitiva utilizando avances tecnológicos o tratamientos neurológicos. Este concepto plantea la posibilidad de utilizar los avances en neurociencia y tecnología de manera ética y segura para aumentar la función cerebral y la capacidad de procesamiento de información, como la mejora de la memoria, la concentración, el aprendizaje y otras funciones cognitivas. No obstante, es fundamental que cualquier avance en este sentido se realice con respeto a los principios éticos y legales, como la privacidad y el consentimiento informado.

5. El derecho a la protección de sesgos: se vulneraría el principio fundamental de la igualdad, por ejemplo, en la decisión de la última cama de un paciente que sería elegida por un ente de IA. Los neuro derechos buscan prevenir la discriminación basada en la información neurocientífica. Esto podría incluir situaciones en las que las personas sean juzgadas o tratadas de manera injusta debido a su perfil cerebral, como en el ámbito laboral o legal.

En síntesis, la neurociencia y los derechos neurocognitivos están intrínsecamente vinculados, ya que la investigación y la implementación de la neurociencia plantean cuestiones éticas y legales fundamentales que deben abordarse para salvaguardar los derechos y la dignidad de las personas. La interacción entre ambas áreas seguirá siendo un tema relevante a medida que la neurociencia continúe avanzando. La relación entre la neurociencia y los derechos neurocognitivos también implica el establecimiento de marcos éticos y legales que orienten la investigación y la aplicación de la neurociencia, lo que puede incluir regulaciones gubernamentales, estándares profesionales y normativas éticas dentro de la comunidad científica.

Potenciar el cerebro ¿algo lejano? No, el empresario Elon Musk ha anunciado que su compañía, Neuralink, ha alcanzado el desarrollo de chips cerebrales listos para ser implantados en seres humanos. No obstante, destacados especialistas en bioética advierten sobre los posibles riesgos que pueden estar asociados con esta práctica.

Es menester mencionar que Elon Musk asegura que este dispositivo abriría la posibilidad de que las personas se comuniquen con aparatos tecnológicos a través de sus pensamientos.

El multimillonario tecnológico ha declarado: «Creemos que dentro de aproximadamente seis meses podríamos llevar a cabo la primera implantación de Neuralink en un ser humano[1]«. 

Durante la presentación de Neuralink, Elon Musk exhibió un video en el que se mostraba a monos escribiendo y jugando al ping-pong el primer juego electrónico en la humanidad, todo ello gracias a los chips implantados en sus cráneos[2]

El neuro link que fue implantado en monos para experimentar y lograron que jugaran este juego, logrando potenciar el cerebro. Rafael Yuste agrega “lo que se puede hacer hoy con ratones, mañana se puede hacer con los humanos[3]. Los ratones han adquirido un rol crucial como modelos experimentales en la exploración del funcionamiento cerebral y su implicación en una amplia variedad de trastornos neurológicos y psiquiátricos en la especie humana. Los científicos tienen la capacidad de modificar el genoma de los ratones para investigar de qué manera las alteraciones genéticas específicas pueden afectar al desarrollo del cerebro y al comportamiento. A pesar de que se enfrentan a notables desafíos de índole ética y técnica en la extrapolación directa de estos avances a los seres humanos, la investigación en ratones continúa siendo esencial para promover el entendimiento en el campo de la neurociencia. Estos modelos animales permiten explorar las bases biológicas subyacentes de trastornos neurológicos y psiquiátricos, allanando el camino para futuros avances que puedan traducirse en aplicaciones terapéuticas beneficiosas para los individuos afectados por estas condiciones.

Como señaló el padre de la inteligencia artificial Alang Turing “This Is Only a Foretaste of What Is To Come, and Only the Shadow of What Is Going To Be[4]” “Esto es solo un anticipo de lo que está por venir y solo la sombra de lo que será”.

Para concluir, ¿qué es lo que se nos viene? ¿tendremos una legislación que proteja estos derechos? Dentro de todo Chile se convirtió en el primer país del mundo en modificar su constitución para incorporar abiertamente los derechos de la era digital y poder garantizar la protección de la integridad mental de las personas frente al desarrollo constante de neuro tecnologías, algo que sin duda seguirá aumentando, ya que la ciencia y el cerebro no tienen límites.

Referencias

[1] Vid a este respecto: CNN. (2022, 2 diciembre). Neuralink: Los humanos podrían ponerse chips en el cerebro, dice Elon Musk. [Sitio visitado el 06 de noviembre a las 17:30 horas].

[2] Vid a este respecto: Welle, D. (2021, 12 abril). Empresa de Musk muestra a Mono con chip usando videojuego. dw.com. [Sitio visitado el 06 de noviembre a las 17:30 horas].

[3] Vid a este respecto: Financiero, D. (2021, 17 diciembre). FT destaca a Chile como primer país en consagrar derechos neuronales y asegura que resto del mundo lo seguirá. Diario Financiero. Recuperado 27 de septiembre de 2023. [Sitio visitado el 06 de noviembre a las 17:30 horas].

[4] Vid a este respecto: Quoteresearch. (2019, 12 octubre). This is only a foretaste of what is to come, and only the shadow of what is going to be – quote Investigator®. [Sitio visitado el 06 de noviembre a las 17:30 horas].

Bibliografía

Vid a este respecto: UNABTV. (2023, 17 agosto). Seminario «Inteligencia artificial, neuroderechos y metaverso» [Vídeo]. YouTube. [Sitio visitado el 06 de noviembre a las 17:30 horas].